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El Govern lamenta lo que considera una total inacción de la Polícia Nacional y la Fiscalía General del Estado ante los sucesivos casos de amenazas recibidas en los últimos meses. Presidència lamenta que nadie haya actuado en el gobieno central al respecto y denuncia que se está aplicando un doble r
Por si no hubiera suficientes motivos de fricción entre el Govern de Carles Puigdemont y las instituciones del Estado, las amenazas de muerte al 'president' en las redes sociales antes de la formulación de Independencia de Catalunya como república suponen otro elemento de choque del gobierno central o del PP.
Puigdemont estaba más que molesto por lo que considera una total inacción de la Polícia Nacional y la Fiscalía General del Estado ante los sucesivos casos de amenazas recibidas en los últimos meses.Presidència lamenta que nadie haya actuado en el gobieno central al respecto y denuncia que se está aplicando un doble rasero dado del perfil independentista de Puigdemont, lo cual facilita la "impunidad" con la que se profieren los insultos directos contra él y su família,
Ya en octubre 2017, un usuario de Facebook que firmaba bajo el nombre de José Fernández Hernández amenazó de muerte al president en estos términos: "Valiente hijo de puta, te va a llegar la hora muy pronto. Tienes al pueblo catalá dividido y tú, cada vez más dinero en tu cartilla. Una bomba debajo de tu coche, alerta". El texto acababa con un insulto personal y un ataque deleznable al concepto de "Països Catalans". Ante ello, Puigdemont reprodujo este mensaje en Twitter y llamó "cobarde" al autor de la amenaza. Finalmente, el usuario se disculpó públicamente y el jefe del Govern dio por zanjada la cuestión sin presentar denuncia como había anunciado.Diez días después, Twitter bloqueó una cuenta desde la que se profirieron amenazas al mandatario catalán. "Oye, hijo de puta, sigue de independentista y tú y tus hijos se van a comer un balazo", rezaba el mensaje en el perfil de Twitter, acompañado de una imagen de una persona encapuchada, a la que solo se le podía ver que sacaba la lengua, y llevaba una pistola en una mano. Los Mossos abrieron una investigación.
El president de la Generalitat, Carles Puigdemont, volvió a recibir una amenaza de muerte a través de Twitter. Fue el último día del 2016 cuando el jefe del Govern, después de felicitar el año con un mensaje en la red social en el que agradecía a los funcionarios por el trabajo realizado, fue replicado por un usuario anónimo que le auguraba su muerte en el 2017.
El usuario autodenomindo @LittleMachix le dedicaba el siguiente mensaje: “Lamento informarle de que este 2017 su muerte está declarada”, y acompañaba el texto con una imagen de una persona apuntando a un objetivo con un fusil. Tras divulgarse la amenaza, la cuenta del usuario y sus mensajes fueron eliminados. Según pudieron saber las agencias, el asunto está en manos de los Mossos d’Esquadra, que ya han abierto las diligencias ad hoc.
La guerra psicólgica contra el President requeriria un espíritu de defensa de todas las instituciones del estado. Pero no existen
Acompañaba su amenaza, una fotografía en la que puede verse a un hombre apuntando con un gran fusil y dos dedos en el gatillo
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De hecho, la difusión del texto amenazante provocó el reproche y la denuncia de muchos otros usuarios de la red social, que reprobaban la “valentía” del tal @LittleMachix. Esta reacción de los usuarios provocó en LittleMachix una segunda amenaza con la publicación de un texto si cabe más vituperable: “Mira lo que te espera, hijo de puta, si sigues hablando... No tardo en localizarte”. Esta vez, el mensaje se hacía acompañar de otra imagen, la de una pistola y un cargador con la mano que la sostenía.
La banalización de la violencia nacionalista española ya la hacen solos el Ministerio del Interior y los tribunales españoles, siempre tan indiferentes a las agresiones a catalanes en nombre de España, y siempre tan diligentes en la criminalización de personas que llevan una estelada o que trabajan el 12 de octubre, sin respetarla fiesta o que ponen las urnas al servicio de la ciudadanía y permiten la libertad de expresión. Lo vimos en la operación mafiosa orquestada por el ministro Jorge Fernández Díaz para desacreditar a políticos catalanes, o en la recomendación de fusilar a Artur Mas, que hacía Miguel Ángel Rodríguez, exsecretario de Estado de Comunicación, o en el vínculo entre Artur Mas y Adolf Hitler que establecieron Jonatan Cobo Ortega, portavoz del PP en el Ayuntamiento de Rubí y la sección local de Montroig (Baix Camp) del PSC-PSOE. Impunes totalmente. Y la estúpida alusión a Companys del medio portavoz del PP, Casado.
Lo bueno de todo es la manifiesta impotencia intelectual de todos estos agresores. Faltos de argumentos democráticos para impedir la libertad de Cataluña, sólo les queda el recurso de la violencia, de la intimidación y de la criminalización. Piensan, desde el fondo de sus intestinos, que ese pueblo retrocederá amedrentado ante amenazas fascistas, de maniobras realizadas por las cloacas del Estado y de los tribunales políticos españoles. ¡Grave error! Grave error de soberbia, haber subestimado la fuerza de Catalunya. Han confundido el estado de desorientación de otros tiempos con una naturaleza débil, sin darse cuenta de que no puede ser débil un pueblo que sigue vivo después de tres siglos resistiendo los ataques de un Estado supremacista como el español. Cuando lo descubran, ya hará años que Cataluña será un Estado independiente
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Carles Puigdemont, ya ha lanzado un mensaje de solidaridad hacía el "club de los querellados", "para los que forman parte ahora y los que entrarán en breve". El mandatario catalán ha recalcado la importancia de "permanecer unidos" para poder vencer así a "la estrategia del miedo". El president ha hecho referencia así a las dos querellas presentadas por la Fiscalía Superior de Catalunya y que el Tribunal Superior de Justicia de Catalunya (TSJC) decidió admitir a trámite, y ha asegurado que "contra más querellas y más amenazas envíen, habrán más voluntarios y más ciudadanos y Puigdemont ha insistido que el Govern "no piensa renunciar al derecho a la autodeterminación, que se ampara a los derechos humanos y a estos no puede renunciar nadie", y ha recordado que el PDeCAT siempre se ha posicionado a favor del derechoa decidir.Imagen de la amenaza a través de Twitter que ha recibido este fin de año el president de la Generalitat, Carles Puigdemont. (LV).
No es la primera vez que el president de la Generalitat recibe este tipo de amenazas a través de la red social. Ya sucedió algo parecido hace unos meses, cuando un usuario le dedicó una amenaza en Twitter que el propio president se encargó de denunciar en la propia red social y en los Mossos. Sin embargo, en aquella ocasión, el usuario en cuestión acabó pidiendo perdón y declarando su arrepentimiento en privado al Gabinete de Puigdemont y en público, en los medios catalanes, lo que hizo que la denuncia fuese finalmente retirada
comp