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Más de mil animales silvestres, la mayoría de la vasta Amazonia peruana, son rescatados cada año en Lima, por lo que se iniciará una agresiva campaña para evitar su compra, informaron autoridades forestales.
"Solo en Lima, en el 2014, las autoridades forestales lograron rescatar 1.005 animales silvestres. Las especies más comunes son aves, tortugas del tipo taricaya y motelo; monos", dijo a la AFP Fabiola Muñoz, directora del Servicio Nacional Forestal y de Fauna Silvestre (Serfor), cuando se celebra este martes el Día Mundial de Vida Silvestre.
Explicó que no existe estadística sobre la cantidad de animales silvestres que se trafican en todo el país y lo que son llevados fuera por diversos puntos de las fronteras. "De cada diez animales que son extraídos de su hábitat, la Amazonia, solo dos llegan con vida a otros lugares y son vendidos", comentó Muñoz.
La funcionaria señaló que son unas 285 especies, en su mayoría aves, que son atractivas para los traficantes, que buscan venderlas en el país o en el extranjero. Sostuvo que Ucayali y Loreto son las regiones donde los traficantes recolectan la mayor cantidad de animales silvestres, por el poco número de policías especializados.
Aclaró que los animales silvestres no son mascotas. "Algunas de esas especies son portadoras de enfermedades que pueden ser trasmitidas a las personas y a las verdaderas mascotas como perros, gatos, conejos y aves de corral", precisó.
Por esa razón, el Serfor iniciará una agresiva campaña contra la venta de animales silvestres, sobre todo en los colegios, para evitar que los niños pidan a sus padres la compra de estas especies.
Muñoz sostuvo que la población debe entender que un mono, una tortuga, un guacamayo, un gallito de las rocas y los reptiles son silvestres y no pueden vivir en una casa. Su compra promueve el comercio ilegal.
El tráfico se incrementa porque las penas son flexibles. Cuando un caso llega a ser procesado en la justicia, la condena no excede los cuatro años, por lo que el reo queda, máximo, con libertad condicional.