La instalación de una antena de telefonía celular tiene enfrentados a un grupo de habitantes de la vereda Sagrada Familia y a la Alcaldía de La Estrella. Pese al inconformismo, la torre fue ubicada en la zona.

Tras 10 años de haber construido su vivienda en esta zona de la vereda Sagrada Familia del municipio de La Estrella, John Jairo nunca pensó que una antena se convertiría en el vecino que más dolores de cabeza le generaría. Cuenta que en septiembre del año pasado, una empresa de telefonía celular decidió instalar la torre a escasos 10 metros de su casa y desde entonces, no concilia el sueño por miedo a que se desplome encima de su inmueble.

Los vecinos dicen que aunque han instaurado tutelas no han podido frenar la instalación de la antena. Aseguran con papeles en mano, que la empresa no cumple con las normas establecidas, no socializó la decisión y no construyó un muro de contención para separarla de las casas. Añaden que invadió límites de sus propiedades, a tal punto, que hasta ha originado grietas en paredes y pisos.

La Secretaría de Planeación de La Estrella aceptó que entregó la autorización para que la antena fuera instalada, en cumplimiento de una solicitud de la Procuraduría y del Ministerio de las Tics que obliga, según ellos, a los municipios a apoyar la extensión de redes de telecomunicaciones.

Pese a estos argumentos, los habitantes dicen que la torre no respeta la distancia con las casas vecinas, ni con instituciones educativas y pone en riesgo la salud y la vida de las personas que viven a 10 metros de distancia.