Luego de la captura de Jhon Jairo Velásquez, alias Popeye, exjefe de sicarios de Pablo Escobar, acusado de concierto para delinquir agravado y extorsión agravada, las autoridades entregaron detalles de este golpe a la delincuencia que fue liderado por la Fiscalía con el apoyo del Gobierno de los Estados Unidos.

El alcalde de Medellín, Federico Gutiérrez Zuluaga, afirmó que "no hay futuro para quienes eligen la mafia como camino. No vale la pena, no es conveniente".

Y añadió "todos los símbolos de la ilegalidad van cayendo, sin excepción. Respecto a la mafia, debemos eliminar todas las zonas grises, trazar límites éticos muy claros".

Claudia Carrasquilla, Directora Nacional Contra el Crimen Organizado de la Fiscalía, aseguró que "alias Popeye no se entregó, él tenía orden de captura por los delitos de concierto para delinquir agravado y concurso por extorsiones".

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