Queda más que confirmado que al Presidente Álvaro Uribe no le importa un carajo los seres humanos. Su interés es única y exclusivamente es el poder político y económico concentrado en no más de 50 familias de su círculo. Que un hombre quien hubiese acogido la carrera militar para, “servirle a la patria” y que después cayera en las manos criminales y salvajes de la guerrilla secuestrado quienes lo tienen secuestrado por mas de una década, para él, no tiene ningún valor. Ante ese joven militar, el Cabo Moncayo, y su orgullo politiquero, ha escogido  el placer que  le produce ver sufrir a la gente lanzando negativas que lo va a liberar a balazos.  En los actuales momentos, Uribe y solamente Uribe, “está haciendo política con el tema humanitario”, del que ha decidido es terreno propio a su soberbia y arrogancia sin los derechos humanos, jurídicos y morales  están por debajo de su capricho.

El profesor Gustavo Moncayo, padre del militar a quien Uribe le ha puesto trabas para su liberación, anunció una tutela contra el presidente. Tiene todo el derecho y nadie sobre la tierra se lo puede impedir. Como padre de un soldado secuestrado por las criminales y sanguinarias Farc tiene la  obligación de tocar a todas las puertas para alcanzar que su hijo vea la libertad, esa que Uribe se empeña día y noche en complicarle por el simple deleite politiquero de demostrar que el que manda es él. Debe ser triste y terrible para un soldado, caer en manos de la guerrilla y cuando haya oportunidad de lograr la libertad, el presidente se la impida. ¿Los militares en ejercicio no estarán viendo y sintiendo esta aberración humana? La acción de tutela pretende, según el profesor Moncayo, “lograr por la vía administrativa lo que por voluntad del Presidente no ha sido posible: ofrecer las condiciones para la liberación de su hijo”.

El ex presidente Ernesto Samper ha dicho una verdad tan grande como el perímetro urbano de Nueva York: “…el Gobierno está más dedicado a impedir que la senadora, Piedad Córdoba, pueda encontrar un entorno favorable para la liberación del cabo Moncayo, que al hecho de que se pueda producir realmente esta liberación… Si el Gobierno quisiera en cuestión de días, el hijo del profesor Moncayo estaría de regreso… el Gobierno es el culpable de que no se haya producido la liberación del cabo Pablo Emilio Moncayo, secuestrado hace 11 por las Farc… El Gobierno ha estado sistemáticamente dedicado a sabotear los contactos que ha tratado de establecer la senadora Piedad Córdoba para obtener ayudas nacionales e internacionales que conduzcan a la liberación del cabo… Aquí lo que hay es una actitud intolerante del Presidente que no ha entendido que un gesto de humanidad no tiene nada que ver con hechos de guerra… El único que está haciendo política es el Presidente porque Piedad Córdoba renunció a su actividad en el partido… Condicionar entrega de Moncayo, como lo hace el Presidente, es condenarlo a cadena perpetua… Piedad y Gustavo Moncayo no están cumpliendo una función política, sino una función humanitaria… Quien está politizado la liberación es el propio Gobierno, el presidente Uribe… "aunque la responsabilidad de la libertad de Moncayo sigue en cabeza de las Farc, la responsabilidad de la vida del hijo del profesor Moncayo está en manos del Gobierno”.

¿Los militares permitirán que se siga jugando impunemente contra uno de sus integrantes solo porque el presidente quiere impedir que una senadora logre méritos personales?

La presidenta de Asfamipaz, Marleny Orjuela, clamó por el regreso a casa del militar secuestrado por las repugnantes y  sanguinarias farc: “Lo único que necesitamos de usted (Presidente) es su corazón humano. No piense tanto en las Farc, piense en los policías y militares secuestrados que se pudren en las selvas de Colombia desde hace 11 y 12 años… Gustavo Moncayo tiene derecho a abrazar a su hijo t Usted puede dejar a un lado los orgullos militares y políticos mientras nace para él la libertad… permítale vivir, aún esta muy joven, una nueva operación ‘Jaque’ no se volverá a repetir jamás.”

¿Es necesario derramar sangre para liberar a Moncayo? ¿Los militares de Colombia estarán complacidos con las trabas que el presidente Uribe le esta poniendo a la liberación de uno de los suyos caído en desgracia? ¿Todo esto sumará para mejorar el respeto por los derechos humanos por parte del gobierno? ¿Se siente políticamente derrotado el gobierno con que la senadora Piedad Córdoba logre la liberación del Cabo Moncayo? ¿Qué pasará con los otros soldados y policías, incluido un general, para impedir que alguien haga mérito los sentenciará Álvaro Uribe para nunca jamás salir a la libertad? ¿No es esta actitud, la de impedir la libertad del Cabo Moncayo, un acto que está mimando la moral de las Fuerzas Armadas? No hay que olvidar que se trata de un soldado que ya debiera estar en libertad. No nos importan las Farc, nos importa Uribe, no nos importa Piedad Córdoba, nos interesa el Cabo Moncayo, aquel el soldado de bajo rango que se traba la selva desde hace más de 10.

¿La ley y el respeto los derechos de los demás encontraran protección en la tutela entablada contra el presidente Álvaro Uribe? ¿Los militares permitirán que se siga jugando impunemente contra uno de sus integrantes solo porque el presidente quiere impedir que una senadora logre méritos personales? ¿Colombia esta frente a la guerra tan mal que se desplomaría políticamente si le  permiten a Piedad Córdoba y a Gustavo Moncayo asistir al rescate del Cabo Moncayo?

Debe ser triste y terrible para un soldado, caer en manos de la guerrilla y cuando haya oportunidad de lograr la libertad, el presidente se la impida.