Alfredo Sanzol, ganador de dos premios MAX,  firma y dirige La calma mágica, un texto divertido, misterioso y emocionante, interpretado por un no menos estupendo reparto.

Oliver (Iñaki Rikarte) quiere dejar el teatro y entrar a trabajar en una oficina para tener un “puesto seguro”. Olga (Mireia Gabilondo), su futura jefa, le ofrece hongos alucinógenos a los pocos minutos de entrevista. No sabemos si lo que sucede a continuación es una alucinación o que la vida es pura y simplemente alucinatoria.

Podía ser una pieza de enredo de las del Siglo de Oro por méritos de argumento, texto y trama, pero viene disfrazada con drogas psicotrópicas, cabezadas ante el ordenador y un  elefante rosa. Una sencilla y a la vez impactante representación en la que realidad y sueño están en un mismo plano.

En definitiva, una de las citas culturales de la temporada en Valencia. Teatro divertido, imaginativo, original e inteligente. Una apuesta segura.

Tras la obra, encuentro con los actores y el público en otra de nuestras #FactoriaRambleta.

+ Fecha: 28 de noviembre.

Hora: 20:30h.

Lugar: Teatro.

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+ Babelia - El País: http://cultura.elpais.com/cultura/2014/10/23/babelia/1414066345_895580.html.

ALFREDO SANZOL: "La calma mágica está dedicada a mi padre, al deseo de poder volver a hablar con él, y al rechazo de que las personas se vayan para siempre. Creo que a mis personajes les pasa lo mismo que al personaje de Mishima y «a medida que transcurre el tiempo, los sueños y la realidad llegan a tener el mismo valor entre los recuerdos. Todo lo que ha sucedido en la realidad se mezcla con lo que pudo suceder. Y, como la realidad deja rápidamente el espacio a los sueños, el pasado se parece cada vez más al futuro»".