¿Quieres recibir una notificación por email cada vez que Montserrat Gutiérrez escriba una noticia?
Entre enero y junio se registraron un total de 3.601 insolvencias, lo que supuso un incremento de un 32% con respecto al mismo período del año anterior
En los próximos meses se prevé un incremento del número de concursos, debido a que las nuevas exigencias de provisiones de los créditos dudosos para los activos financieros del sector inmobiliario incentivan muy poco la financiación de dinero nuevo en situaciones críticas.
Malos tiempos para las empresas
Estos son algunos datos que se desprenden del Baremo Concursal que trimestralmente elabora PwC, a partir de la información publicada en el Boletín Oficial del Estado.
La evolución histórica, desde 2004 hasta el primer semestre de 2012, muestra una tendencia claramente creciente con la excepción de 2010 donde se produjo una ligera reducción. La cifra alcanzada en este primer semestre del año supone un nuevo máximo histórico.
Según se desprende de este estudio, el incremento que se ha producido en este primer semestre del año hace previsible un año 2012 con una elevada actividad concursal.
La situación económica y, en particular, la situación que vive el sistema financiero español están detrás del nuevo incremento de concursos de empresas. Cada vez existe menos margen para la refinanciación de la deuda, tanto por el lado de las compañías, que llevan muchos meses consecutivos de deterioro de sus cuentas de resultados, como por el lado de las entidades financieras, que tienen serias restricciones para proporcionar dinero nuevo a las empresas.
Los peores, el sector de la construcción e inmobiliario
De nuevo, las Comunidades Autónomas que registraron mayor actividad fueron Cataluña, con un 21% del total de concursos en España, la Comunidad Valenciana (16%) y la Comunidad de Madrid (12%) que sumaron la mitad de las insolvencias españolas. Le sigue Andalucía que representa el 10% de los concursos, Galicia (8%) y País Vasco (7%). Canarias y Navarra son las únicas comunidades donde se ha reducido el número de concursos, un 11% y un 13% respectivamente, y La Rioja donde más crecen, un 106%.
Los sectores de construcción e inmobiliario siguen sin levantar cabeza y concentran casi la mitad (un 45%) del total de concursos publicados. Las insolvencias de compañías del sector de la construcción han crecido un 40% (286 concursos) y las del inmobiliario un 26% (123).
Se ha producido un aumento significativo en el número de empleados que ha perdido su empleo por encontrarse las empresas en concurso
El informe destaca que, en los próximos meses, se prevé un incremento del número de concursos, debido a las nuevas exigencias de provisiones de los créditos dudosos para los activos financieros del sector inmobiliario.
Las entidades financieras tienen pocos incentivos para prestar dinero nuevo a estas compañías, así como para refinanciar créditos que cuentan con un alto nivel de provisión y cuya capacidad de generación de caja es más que dudosa en el corto y medio plazo.
Durante este primer semestre también el sector servicios y el industrial han experimentado importantes incrementos: 25% y 24% respectivamente, con un peso, en el total de concursos, del 11% y 14%.
La mayoría de empresas que se han declarado en concurso cuentan con un activo inferior a 2 millones de euros. En los primeros seis mese del año, se ha producido un aumento de la actividad concursal en los tres rangos superiores por volumen de activo.
Esta subida se explica porque las grandes empresas que refinanciaron su deuda en 2008, 2009 y 2010, ahora entran en situación concursal. El promedio de valor del activo ha disminuido con respecto al mismo periodo del año anterior, pasando de €7, 9 millones a €6, 6 millones, es decir, un 17% menos.
Por último, se ha producido un aumento significativo en el número de empleados que ha perdido su empleo por encontrarse las empresas en concurso. Respecto al mismo periodo del año anterior, se ha incrementado un 21%, lo que en número absolutos significa un total de 12.092 trabajadores.
Por lo que se refiere a las empresas en concurso en función del número de empleados, la mayoría tienen menos de 50 empleados, mientras que las de más de 250 apenas llegan al 1%.