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El óxido en las relaciones no es por poco uso, más bien por el descuido y falta de mantenimiento
Un poeta famoso expresa que se puede acabar el amor de tanto usarlo, sería una excelente manera de gastar ese gran sentimiento de sacrificio, pero la realidad es que el amor nunca acabará según la biblia, si el amor no se acaba, podemos preguntar a dónde se esconde ?
El amor es el aceite que permite el movimiento de la transmisión de la vida y sin está sustancia viscosa el vivir en relaciones se convierte en un motor a punto de fundirse.
La falta de palabras positivas, el toque como señal de presencia sin detalles motivadores y la poca valoración del otro como persona, estas cosas son elementos promotores de óxido en la práctica del amor. Todos necesitamos tener bien engrasadas las piezas del interior para poder tener una vida dinámica y placentera.
Humedecer el alma con esperanza y fe
Un amor oxidado se puede volver a brillar, la ternura, buena comunicación son lubricantes bien finos que pueden devolver el esplendor y hacer ver el amor vivo e iluminado.cuando el afecto está lleno de moho, da espacio para crecer hongos de indiferencia y solo se manifiesta rasgos de baterias que te roban la llama de la felicidad.
Para evitar la putrefacción del alma, debemos poner siempre nuestro amor en lugares protegidos, evitar la humedad del rencor, barrer los polvorines de la discordia y humectar con esperanza y fe .
El amor no se puede dejar oxidar