Brigadistas habían logrado en las últimas horas detener el avance del fuego hacia el Parque Nacional Conguillío, en el sur de Chile, donde se mantenía activo un gigantesco incendio forestal.

"Las líneas cortafuegos establecidas en la zona que avanzaba hacia el Parque Nacional Conguillío están dando los resultados técnicos esperados y el fuego no tuvo avance en ese sector", dijo un último reporte de la Corporación Nacional Forestal (Conaf).

El incendio se mantiene, no obstante, activo, y seguía avanzando en la vecina Reserva Nacional China Muerta, en la comuna de Melipeuco, región de la Araucanía, unos 700 km al sur de Santiago.

Allí el fuego había afectado una superficie aproximada de 6.204 hectáreas, en cuya extinción trabajaban brigadistas argentinos y uruguayos.

En las últimas horas estalló, asimismo, otro incendio forestal en la comuna de Panguipulli, cercano a sectores habitados y donde se habían consumido unas 1, 5 hectáreas.

Se supo además de otro incendio forestal en el sector La Laja, en la comuna de Puerto Varas, con una superficie consumida de unas cinco hectáreas de bosque nativo y matorral.

"Este incendio presenta comportamiento extremo, rápida propagación y amenaza a viviendas", advirtió de su lado la Oficina Nacional de Emergencias (Onemi).

De acuerdo a un último reporte de la Conaf, hasta el 25 de marzo existían 116 incendios vigentes en todo el sur de Chile y la región de Valparaíso (centro), de los cuales 26 se mantenían en combate y el resto en observación o en vías de ser controlados.

Los incendios forestales se han propagado en el sur de Chile, avivados por una extendida sequía, altas temperaturas y fuertes vientos que se han registrado en las últimas semanas.

La situación contrasta con las fuertes inundaciones que azotan al árido norte de Chile.