Una falla eléctrica obligó a cerrar tres líneas de metro en Santiago de Chile en plena hora punta de la mañana del viernes, afectando el desplazamiento de entre 400.000 y 500.000 personas en la capital.

Metro de Santiago informó a las 6H30 (9H30 GMT) en su cuenta de Twitter del cierre de la línea uno, dos y cinco por un "inconveniente eléctrico" en la estación Moneda, frente al palacio de gobierno.

Horas más tarde, el servicio había sido restablecido sólo parcialmente entre algunas estaciones de la línea uno (la más concurrida) y cinco, mientras que la línea dos recuperó el funcionamiento.

Las autoridades informaron que las líneas no serán reparadas hasta la madrugada del sábado, y se suspendieron las clases en colegios por la tarde.

Durante la mañana del viernes, miles de personas se acumularon desorientadas en los paraderos de buses de transporte público en busca de alternativas para movilizarse, ante los embotellamientos de vehículos en las calles.

"Entre 400.000 y 500.000 personas" fueron afectadas por el corte, según el ministro de Transporte Andrés Gómez-Lobo, quien pidió paciencia a los usuarios y empleadores, y solidaridad a los conductores de vehículos para que colaboraran en trasladar a las personas varadas, en un día de temperaturas superiores a los treinta grados.

"Dan ganas de llorar", decía a radio Cooperativa una pasajera, quien se quejaba por los altos costos del boleto (1, 17 dólares) y la baja calidad del servicio.

Según el gerente comercial de la compañía, Álvaro Caballero, la falla es producto de un cortocircuito de origen desconocido en los cables que alimentan el transporte subterráneo.

Gómez-Lobo informó que el sistema público de Transantiago fue reforzado con 150 buses interurbanos que recorrerán las rutas de metro en la superficie, y que toda la flota de buses públicos funcionará durante el día a plena capacidad.

La presidenta de Chile, Michelle Bachelet, citó con urgencia en La Moneda al ministro de Transportes y al presidente de Metro, Aldo González, para conocer las causas de la falla.

Se trata de la quinta falla en el año que afecta al Metro de Santiago, un sistema de transporte clave para la capital chilena, de casi siete millones de habitantes.