Asidero

Nos encontramos ante lo intolerable, donde el racismo y fascismo ya fatigados como términos de uso visual han tomado sus campos emotivos y, nos han llevado al tránsito de ser una palabra dura y de estigmatización definitiva. Ahora se agrega un nuevo término del mundo mediático, es lo referido a la buena conciencia de una sociedad que da unos resultados desastrosos o de buena voluntad. Venezuela, en esta década se ha convertido en una casucha de condenados y, a todos los ponen a la vista y el DGCIM en vez de ser unas oficinas de administración de justicia, es simplemente, un salón de prisioneros, estén o no estén acordes con el proyecto, en singular, del presidente Nicolás Maduros Moros que poco es bolivariano ya que la estructura del Estado ha sido hostigadas por fuerzas derechistas aupadas por jefes comunales sin definición propia y con extremas dudas que ponen en juego el destino del mismo gobierno en su esencia.

Hay que descubrir muchas verdades escondidas en conciencias que nunca han tenido un quehacer con la República, son traiciones sumadas en su quehacer interno.  Entonces, un revolucionario y que se dice como tal, debe tener cuidado con su conducta hacia la xenofobia. En esto, tiene que ver las estrategias colocadas en parrillas de televisoras que nos están llevando a una apatía política y en mi urbanización a pesar de repartir 5440 cajas de comidas en cajas CLAPS, se resume en un promedio de mil votos al momento de un acto electoral.

Por ello, digo que el proceso revolucionario en el Estado Bolivariano de Venezuela ha fracasado y los signos es que se cristalice un cambio oportuno del tren ejecutivo nacional que, puede llegar hasta la simbología del ciudadano presidente. En todo lugar se habla mal de gobierno, pero las colas son constantes en las entidades bancarias y, los más beneficiados son los miembros de los partidos opositores y los jefes de calle y miembros de Somos Venezuela incumplen con los registros de consultas y juegan al doble papel de acertivez ante la administración del Estado.

La ignorancia política e ideológica es bárbara, nos hemos dedicado a promocionar la cultura del Medio Oriente y Asiática y resulta que nuestra cultura es occidental y, los únicos que están comprando oro es China, Rusia y Turquía. Trump a fuerza de jabs está defendiéndose y ha logrado fortalecer el dólar, cuando ya se encontraba abatido en Latinoamérica bajo el crespúsculo de Chávez con El Sucre y la operación candado en economía, pero, cayó en Colombia, ningún guerrillero, tanto de la FARC como el ELN hicieron el trabajo comunitario, comenzando enriquecerse entre sí, Gustavo Petro, ahora llamado el intelectual por Rafael Correa en un programa televisivo, sin una moral y ética en su haber, pero sí un pequeño burgués que quebrantó bajo su influencia las normas del Movimiento M- 19 empezó a destacarse en alterar el orden público y el resultado es la baja de muchos jóvenes de estatura izquierdista y otros convertidos en falsos positivos. Eso sí, le gusta vestirse con ropa y zapatos de hechura norteamericana y sus viajes hacia Nueva York, Condados y colonias norteñas es normal. Mientras el pueblo de izquierda pasa hambre y deficiencia de medicamentos. El pueblo de la derecha mediática en Venezuela goza de privilegios y compra en dólares. Este, es el problema verdadero de la izquierda latina, sus falsedades y pocos aciertos.

Cuando hablo de derechismo, sugiero a un grupo político que se formó en la Universidad Católica Andrés Bello, Facultad de Derecho en la Universidad de Carabobo e hijos de la cofradía que visitaba la Casa Tinajero del Doctor Rafael Caldera Rodríguez. A ellos le decían Araguatos por su habilidad de saltar y posesionarse de puestos de control administrativo. Es como el ex primer ministro de España, José Luis Rodríguez Zapatero que esta destruyendo todo lo hecho por Suárez y Felipe González en España y la Cuenca del Caribe.

Evo, ocúpese de su pueblo y vaya a La Paz. Usted es el único responsable de la crisis boliviana. Fue buen presidente, pero, mal estratega

Hay un reciclaje de la izquierda latina y europea.  Donde se agregan componentes del bagaje cultural sirio- mesopotámico y el aspecto cristiano de los pueblos del Sur, quienes recibieron Credos Bíblicos de Misioneros provenientes del Reino Unido, Canadá y Estados Unidos de Norteamérica. Jamás se nos describe y enseña sobre la verdad indígena y ese antecedente milenario de nuestras culturas ancestrales. Ese fue el gran error de Evo Morales y Rafael Correa, no fortificaron a los pueblos indigenistas y Lula cayo en el vacío de Odrebeth. Solo Néstor y Chávez hicieron un esfuerzo de construcción a la integridad nacionalista, pero, estaban solos, Ya conocemos el resultado,

Ahora, todo es terrorismo, mientras las tropas confederadas de los italianos, franceses, ingleses y norteamericanas avanzan y ya vemos, como los rusos descubrieron quien exploto al Ara San Juan y, ahora la gran diversidad de virus que nos están regando en Asia y América Latina, pero, algo más peligroso, están mutando bacterias y animales depredadores en su nivel de reptiles que son consumidos por el hambre que sufren los pueblos de izquierda, lo que nos hacen, hoy, es hablar de Trump y terrorismo. Los grandes Imperios ya determinaron que el magnate hizo un buen trabajo de recaudador de impuesto sobre China y la doblega con el Coronavirus.

La izquierda Latina, necesita una visión más allá del Foro de Sao Paulo, nuevos líderes, nuevos hombres que conozcan de cibernética, electromagnetismo, redes sociales y de Ciencia, no ignorantes provenientes y que de colectivos.

* Escrito por Emiro Vera Suárez, Profesor en Ciencias Políticas. Orientador Escolar y Filósofo. Especialista en Semántica del Lenguaje jurídico. Escritor. Miembro activo de la Asociación de Escritores del Estado Carabobo. AESCA. Trabajo en los diarios Espectador, Tribuna Popular de Puerto Cabello, y La Calle como coordinador de cultura. ex columnista del Aragüeño