Hace unos días os informábamos de la posible operación de venta por parte de Huawei de su marca Honor, información que adelantaba la agencia Reuters. Huawei ha confirmado que venderá su submarca de telefonía Honor, conocida como su 'hermana pequeña', a Shenzhen Zhixin New Information Technology Co., un consorcio de socios y empresas respaldadas por el gobierno.

La tecnológica china no ha dado más detalles sobre el precio de la venta, aunque lo que avanzaba Reuters la pasada semana era un acuerdo por valor de 100.000 millones de yuanes -unos 13.000 millones de euros-. En el comunicado oficial lo único que se aclara es que "una vez se complete la venta, Huawei no tendrá acciones ni participará en ninguna gestión comercial o actividades de toma de decisiones en la nueva compañía Honor".

¿Por qué? El veto de Estados Unidos a Huawei -todavía efectivo y sin noticias de si va a cambiar bajo la futura administración de Biden- le ha puesto las cosas difíciles a la compañía china. Si Honor se independiza de su empresa madre, podría comprar componentes que actualmente le están vetados por estar asociada a ella, esquivando las restricciones.

En su comunicado, la propia compañía subraya que "el negocio de consumo de Huawei ha estado bajo una tremenda presión últimamente" debido a "una falta persistente de los elementos técnicos necesarios" para su negocio de telefonía móvil, y que "este movimiento ha sido realizado por la cadena industrial de Honor para garantizar su propia supervivencia".

"Desde su creación en 2013, la marca Honor se ha centrado en el mercado juvenil ofreciendo teléfonos en el rango de precios de gama baja a media. Durante estos últimos siete años, Honor se ha convertido en una marca de teléfonos inteligentes que envía más de 70 millones de unidades al año", informa el comunicado emitido por la firma tecnológica.

Según datos de Canalys, Honor representa el 26% del total de smartphones enviados por Huawei.

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