Globedia.com

×
×

Error de autenticación

Ha habido un problema a la hora de conectarse a la red social. Por favor intentalo de nuevo

Si el problema persiste, nos lo puedes decir AQUÍ

×
cross

Suscribete para recibir las noticias más relevantes

×
Recibir alertas

¿Quieres recibir una notificación por email cada vez que Diasporaweb escriba una noticia?

Los juguetes son una fiesta de sonrisas y vida, pero a veces se esconde agazapada la muerte

09/08/2017 04:20 0 Comentarios Lectura: ( palabras)

El juguete no es cosa de niños. La mayor parte de los más peligrosos se fabrican sin ningún control de seguridad fuera de España. Se importan 171 toneladas de artículos de ese estilo al año y el 85% procede de China.Deben estar sellados, pero el control de seguridad puede estar falsificado

España importa 171.000 kilos de juguetes. Está comprobado que muchos a pesar de haber sido retirados del mercado, se siguen vendiendo.

España ha lanzado un total de 108 alertas por juguetes considerados "peligrosos", la categoría de productos que lidera un total de 2.044 alertas en toda la Unión Europea (UE), más de la mitad de ellos procedentes de China (53 %).

La comisaria de Justicia y Consumidores de la CE, Vera Jourová, celebró sin embargo que se haya producido un retroceso en el número de productos "peligrosos" que el "gigante asiático" envía al mercado comunitario, que ha pasado de un 62 % en 2015 al 53 % en 2016, fruto de "la cooperación con las autoridades chinas". 

Son datos del último informe sobre el Sistema Europeo de Alerta Rápida (RAPEX), un instrumento que busca el intercambio de información entre países y autoridades europeas para detectar productos peligrosos para el consumo, incluidos los juguetes.

En 2016, los juguetes fueron la categoría de mercancías más notificadas (26 %), seguidos por los vehículos de motor (18 %) y las prendas de vestir, los textiles y los artículos de moda (13 %), en una estadística que no incluye los productos alimentarios.De esas 108 alertas por juguetes, 14 incluian vehículos de motor, 24 por aplicaciones eléctricas y 25 textiles.

Los productos peligrosos de origen europeo supusieron 468 notificaciones (23 %), 24 de estas por productos de fabrcacón española, mientras que 102 notificaciones (5 %) correspondían a Estados Unidos y 53 (2, 6 %) a Turquía. También se registraron 158 productos (8 %) de origen desconocido, precisa el informe de la CE.

Jourová también destacó que en este último año el Ejecutivo comunitario ha impulsado la cooperación con tres plataformas de venta en internet, Amazon, Ebay y Alibaba, "con el fin de eliminar los productos comercializados que van directamente al consumidor, lo que implica nuevos riesgos para la seguridad del mismo producto".

"Queremos mejorar esta cooperación y extenderla a otras plataformas digitales, cada vez más gente compra productos en línea y es importante y más difícil proteger a los consumidores en ese ámbito", subrayó.

El total de las 2.044 alertas supuso 3.824 medidas de seguimiento, concretadas, entre otras acciones, en la retirada de productos, explicó la comisaria, lo que implica que "se duplica" el número de reacciones.

"Las autoridades nacionales siguen más de cerca las alertas y adoptan todas las medidas necesarias para que el mercado sea más seguro para los consumidores", aseguró Jourová. En cuanto a los productos retirados del mercado, la comisaria mencionó el teléfono Samsung Galaxy Note 7, debido a que algunas baterías defectuosas calentadas en exceso pueden arder o estallar, una alerta que fue lanzada en 15 países, entre ellos España, y que llevó a la compañía al cese de su producción.

La comisaria también mencionó un pez de juguete cuyas pequeñas piezas podían tragarse fácilmente los niños menores o un casco de hockey que mostró durante la presentación del informe y que, según explicó, "no protege suficientemente a los niños porque no tiene capacidad de absorción de choque".

Como no podemos nombrar todos los retirados hemos elegido unos cuantos que pueden servir de ejemplo de lo que podríamos llamar juguete trampa porque el niño espera gozar con lo que le han regalado y se encuentra con una trampa:

La tendencia de introducir un juguete "genial" lleva a muchos comerciantes a jugar con la vida de los compradores e ir a parar a un pobre niño

Las pelucas de materiales sintéticos son peligrosas poe ser altamente inflamables, cualquier chispa cercana puede provocar que se conviertan en una antorcha, con los efectos desastrosos.

Algunos juguetes contienen piezas pequeñas que pueden separarse fácilmente del tronco central y que, ingeridas por un bebé o un niño pequeño, pueden ocasionarle la asfixia.

Estos juguetes eléctricos se calientan mucho y pueden arder, y también se ponen a muy alta temperatura el cable y el enchufe. Por otro lado, el árbol de navidad del fondo también sufre riesgo de salir ardiendo por malas conexiones eléctricas y chispazos.

Las bolsas calentadoras de agua son de pequeño tamaño, ideales para una cuna de bebé. El problema es que están fabricadas con unos materiales que dejan pasar el calor hasta llegar a quemar la piel que esté en contacto con ellas. Ademas, el sistema de cierre es muy precario, y se abre con suma facilidad, con el riesgo de empapar el lugar en que se encuentre.

La CE cofinancia cada año una serie de acciones para vigilar los productos que entran en el mercado comunitario, con un presupuesto de 2, 5 millones y que cuenta con la colaboración de laboratorios especializados para comprobar la peligrosidad de los artículos, acciones que, a menudo, desembocan en notificaciones a este sistema de alerta. Jourová destacó además la mejora del sistema de alerta que ha incorporado "la actualización 'online' personalizada", que permite compartir alertas a través de redes sociales.

Entre estos figuran juguetes para niños menores de 3 años, cunas, productos químicos en artículos de ropa, detectores de humo, fuegos artificiales o batidoras.La TV ha mostrado que estos juguetes ilegales y perniciosos para la seguridad de los más pequeños siguen estando a la venta.

Jugar con según qué juguetes no es cosa de niños. La mayor parte de estos juguetes peligrosos se fabrican sin ningún control de seguridad fuera de España, que os los juguetes que se venden en España deben tener un certificado europeo, un CE visible en la etiqueta del producto. Este sello, en principio, garantiza que el fabricante ha diseñado el juguete según las normas de seguridad de la Unión Europea, pero se descubre que hay fraude en torno a ese sello y que algunos fabricantes chinos lo falsifican y consiguen colocar sus productos sin pasar ningún control. ¿Son realmente peligrosos estos juguetes para nuestros hijos?. Los reporteros Ricardo Pardo y Verónica Dulanto han investigado con atención por dónde entran estos juguetes, cómo se persigue al que los comercializa y los riesgos que representan para los más pequeños de la casa.

Desde el Puerto de Barcelona, efectivos del Ministerio de Hacienda y el de Economía, junto a los servicios de control de aduanas despliegan sus fuerzas para vigilar la calidad de los productos que entran. También hay chequeos en polígonos y bazares, y se interceptan muchos juguetes peligrosos. Por su parte, las Comunidades Autónomas advierten de la absoluta necesidad de que estos productos tengan las certificaciones necesarias. A pesar de todo este esfuerzo, solo se puede someter a mecanismos de control a entre un 20% y un 22% de los juguetes que entran en nuestras fronteras. Uno de los problemas principales que se encuentran los controladores es que son difíciles de detectar precisamente porque muchos de estos productos llevan falsificado el certificado de la CE.

Las cámaras de TV ofrecieron el testimonio de una madre en León que perdió a su hijo por asfixia al meterse en la boca una de la piezas que integraba el juguete. Diez años después del caso, los reporteros del tema comprobaron que este artículo se sigue vendiendo en las tiendas. Hay también el testimonio de una madre de Badajoz que casi pierde a su hija por un disfraz que ardió en 20 segundos. Existe una red de alertas que tipifica los juguetes peligrosos. El equipo de un programa acompañó a la Policía para constatar si esta red funcionaba, comprobando de nuevo que muchos juguetes tipificados de peligrosos seguían a la venta.

Garantizar que un juguete sea seguro cuesta dinero: tiene que superar tests y certificaciones reales que encarecen los productos unos 1.000 euros por modelo. En un laboratorio de A Coruña, grababan cómo se realizan distintas pruebas a los juguetes para garantizar su idoneidad y cómo los que no pasan el control son retirados del mercado. Muchos importadores, sin escrúpulo, consiguen burlar los controles porque pasado cierto tiempo estos productos vuelven al mercado. 

Así pues la peligrosidad de los juguetes puede ser mayor o menor dependiendo a la larga del vendedor, si su ética es muy baja hará las trampas que sean para que el juguete llegue al mercado. La ética no se puede medir por países pero es un hecho que los vendedores de juguetes chinos tienen la ética muy baja que se mide por los porcentajes de ventas. Así que : kontuz!!!


Sobre esta noticia

Autor:
Diasporaweb (1875 noticias)
Visitas:
10683
Tipo:
Reportaje
Licencia:
Creative Commons License
¿Problemas con esta noticia?
×
Denunciar esta noticia por

Denunciar

Comentarios

Aún no hay comentarios en esta noticia.