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La comunicación externa se define como el conjunto de operaciones de comunicación destinadas a los públicos externos de una empresa o institución, es decir, tanto al gran público, directamente o a través de los periodistas, como a sus proveedores, accionistas, a los poderes públicos y administraciones locales y regionales, a organizaciones internacionales, etc.
En la actualidad, la publicidad ha dejado de ser la única herramienta válida para introducir un mensaje en la sociedad y ha dado paso a una nueva etapa más imaginativa: la comunicación integral. Cuando hablamos de comunicación integral, hablamos de todos los procesos que son capaces de comunicar algo dentro de la organización.
La comunicación externa debe ser dinámica, activa, y sobre todo permanente. Es muy importante hacer público el plan anual de trabajo, dar cuenta de lo que está pasando en cada una de las actividades que se realizan. Cada acción ha de tener objetivos, a veces se logran, a veces no, a veces se logran cosas que no estaban previstas. Es también una buena práctica de comunicación externa la rendición de cuentas, dar a conocer públicamente el balance de la organización.
Cada cierto tiempo es conveniente hacer una reflexión acerca de cómo estamos contando lo que hacemos, ver cómo lo comunicamos, que impacto social tiene, que nuevos horizontes se abren, y también compartir las dificultades, lo que no se logra, el porqué no se ha logrado. Comunicar lo que hacemos es algo más, que simplemente informar, es construir confianza, es hacer que el que está del otro lado pueda sentirse parte, y hasta pueda sumarse a la causa.
Por otra parte, si cotidianamente no registramos nuestras actividades y utilizamos las herramientas de medición de impacto a nuestra disposición, debemos dedicar más tiempo a la redacción de informes, porque, si no lo hacemos, nos perdemos la posibilidad de tener una foto actualizada de como camina nuestra organización.
Los beneficios que comporta incorporar a una organización una cultura de transparencia y de rendición, son muchos, genera mayor apertura, aumenta la comunicación interna, mejora la organización de la información, resalta a qué contribuyen los que contribuyen con ella, y sobre todo estimula a que sean cada vez más los que quieran contribuir y sumarse a la organización.
No se trata solamente de una tendencia global para ser más competitivos en nuestro ambiente, y esto ya lo vale, sino que, se trata de una elección filosófica, una forma de ser, cuanto más transparentes, más posibilidades tenemos todos de sentirnos más solidarios para contribuir a un cambio social que sea a beneficio de todos.