No hay mejor forma de ganarse la vida,

que ver el impacto de nuestro esfuerzo reflejado en una sonrisa.

No hay mejor forma de ganarse la vida,

que inspirar con nuestro ejemplo a quienes nos rodean.

No hay mejor forma de ganarse la vida,

que perder la noción del tiempo cuando hacemos lo que amamos.

No hay mejor forma de ganarse la vida,

que luchar estoicamente por un sueño que parecía imposible.

No hay mejor forma de ganarse la vida,

que ver nuestro trabajo como un medio para un fin superior.

No hay mejor forma de ganarse la vida,

que sentir el cálido afecto de aquellos a quienes servimos.

No hay mejor forma de ganarse la vida,

que recorrer solitarios caminos y descubrir nuevas realidades.

No hay mejor forma de ganarse la vida,

que vencer la desesperanza y lograr lo que te dijeron que no podías.

No hay mejor forma de ganarse la vida,

que desplegar nuestras alas y mostrarle al mundo un nuevo amanecer.

No hay mejor forma de ganarse la vida,

que tocar la de los demás.

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