Unos yihadistas del grupo Estado Islámico (EI) mataron a 30 miembros de las fuerzas del régimen de Bashar Al Asad en un ataque contra un campo petrolero en la ciudad siria de Homs (centro), indicó este miércoles el Observatorio Sirio de Derechos Humanos (OSDH).

"El EI logró hacerse con el control de una parte del campo", después de que el ejército lo recuperara de manos de los yihadistas en julio, dijo a la AFP Rami Abdel Rahmane, director del OSDH.

Rahmane aseguró que 30 vigilantes del campo y milicianos prorrégimen habían muerto en el asalto y que también había bajas en el bando yihadista, aunque no pudo dar una cifra exacta.

El campo de Al Chaer, situado cerca del yacimiento arqueológico de Palmira, no es el primero en poder de los radicales: el EI ya se ha hecho con el control de varios campos petroleros y de gas en Siria e Irak.

Desde mediados de junio, la extracción de petróleo y su reventa en el mercado negro aporta al grupo un millón de dólares diarios, estimó el subsecretario del Tesoro estadounidense a cargo de la lucha contra el terrorismo, David Cohen. No en vano, el EI es la "organización terrorista mejor financiada" del mundo, según Estados Unidos.