Encontramos con nuestra Cámara Ambulante en el Hospital Infantil Concejo de Medellín a un niño de 2 años de nacido que ha sufrido más de siete fracturas, al parecer, por una enfermedad huérfana conocida como huesos de cristal. El drama de este pequeño es por cuenta de la EPS que no le ha autorizado exámenes para diagnosticar su enfermedad.

Maximiliano tiene 27 meses de nacido y aunque aparenta ser un niño feliz, vive un drama familiar y de salud por cuenta de una Osteogenia Imperfecta o huesos de cristal, y que en los últimos cinco meses les ha generado siete fracturas en manos, pies y cuerpo.

La última fractura en su fémur derecho fue hace tres días, fue atendido de manera oportuna y responsable en el Hospital Infantil Concejo de Medellín, no obstante la tragedia de este pequeño corre por cuenta de Coomeva donde está afiliado en el Régimen Subsidiado y según su madre y abuela, le han negado desde que nació autorizaciones y exámenes prioritarios para determinar por ejemplo, si las constantes fracturas obedecen a su enfermedad de huesos de cristal o a otro diagnóstico.

Con medio cuerpo enyesado, Maximiliano juega y responde a los cariños de su mamá que con documentos de tutelas y desacato de tutela en mano se lamenta de las negativas continuas de Coomeva y que hoy no le ha permitido siquiera saber el real diagnóstico de su hijo.

Por el yeso que siempre lo acompaña, Maximiliano necesita de más de 15 pañales diarios y su familia no tiene como costearlos y cada vez que se fractura, deben salir de urgencia hasta en Tranvía y Metrocable, por eso, apelan a la solidaridad ciudadana y a una respuesta urgente de la EPS que mejore la calidad de vida de Maximiliano.

A través de un comunicado, Coomeva se comprometió a brindarle la atención oportuna al menor.

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