Somos el resultado de nosotros mismos, pero en conjunto con lo que logramos tomar de cada una de las personas que han estado a nuestro alrededor desde que estuvimos en el vientre materno. Tomamos prestado lo que nos gusta, lo que queremos imitar, a veces lo que queremos vivir. Y no somos tan conscientes de esto hasta que empezamos a ver que algunas de esas cosas que tomamos prestadas se quedaron con nosotros pero el autor original...o por lo menos del que lo tomamos, ha partido. Nos queda entonces el recuerdo, las imagenes grabadas como fotos en algún lugar de nuestro cerebro.

No le temo a la muerte, puedo tener miedo del dolor al experimentarla o las consecuencias que pueda tener en mi familia, pero no me da miedo morir. Es así como en algunas ocasiones puedo llorar o estar triste por la muerte de un ser querido pero nunca cuestionarla...es el flujo de la vida y hay que dejarlo correr.

Hay días, en los que las miradas y sonrisas de los muertos llegan de repente, sin avisar, repetidamente, como tratando de dar un mensaje

Sin embargo hay días, en los que las miradas y sonrisas de los muertos llegan de repente, sin avisar, repetidamente, como tratando de dar un mensaje, y he de confesar que no se como interpretarlo. Hay una gran parte de mi que además se alegra porque en mi aún están vivos, y otra que se pregunta si alguna vez más tendré la oportunidad de escuchar, de aprender y de compartir, es ahí cuando viene la nostalgia "Tristeza melancólica originada por el recuerdo de una dicha perdida" REAL ACADEMIA ESPAÑOLA. Entonces sí...es nostalgia lo que siento y alguna lágrima quiere salir como si fuera la más sincera forma de comunicarnos ahora que ya no están.

Hay dos gran lecciones con respecto a la muerte, de las que ya se ha hablado mucho, pero que puedo entender y compartir. La primera: es mejor en vida...es mejor en vida dar todas las sonrisas, abrazos, conversaciones, tragos, amor y complicidad...es mejor todo en vida, es mejor recordar y sonreir que no tener mayores recuerdos y llorar por lo que pudo haber sido. El segundo y muy importante: Ninguna de las pequeñas cosas que nos quitan el sueño son realmente tan significativos, si vamos a lo básico, a estar en paz, a ser felices, a la naturaleza de la vida, podemos entender que no hay cuentas bancarias, seguros, empleos, relaciones, casas, apartamentos, carros y títulos a las que debamos obedecer tanto como para dejar de lado dicha naturaleza. Vamos a morir..un día, cercano o lejano y mientras tanto no vivimos, no sonreímos, no ayúdamos, no compartimos....Almacenamos...nunca hay tiempo...ni espacio y un día moriremos, sin haber dado lo mejor de nosotros a todos los demás que lo piden a gritos.

Tomamos prestado lo que nos gusta, lo que queremos imitar, a veces lo que queremos vivir

Es por eso que mi Nostalgía por los Muertos es una expresión del agradecimiento por cada minuto, cada sonrisa y mirada sincera que hoy una y otra vez aparecen en el momento menos esperado.