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La Unión Europea estudia la posibilidad de convocar una reunión extraordinaria de sus ministros de Relaciones Exteriores la semana que viene para sancionar la ofensiva lanzada por los rebeldes prorrusos en el este de Ucrania con el apoyo de Moscú, indicaron el sábado fuentes oficiales a la AFP.
El jefe de la diplomacia letona, Edgars Rinkevics, pidió oficialmente el sábado la convocatoria de esa reunión a Federica Mogherini, la responsable de la diplomacia europea, que ya abrió consultas al respecto, explicaron esas fuentes.
La ofensiva de los separatistas prorrusos apoyados por Moscú exaspera a muchos dirigentes de la UE.
"Una vez más, el sosiego ha alentado al agresor a cometer actos más violentos. Ha llegado la hora de intensificar nuestra política en base a los hechos, no a ilusiones", tuiteó el presidente del Consejo de la UE, el polaco Donald Tusk, tras reunirse con el presidente ucraniano Petro Poroshenko.
Mogherini también se reunió con Poroshenko tras los bombardeos de la ciudad portuaria de Marioupol, controlada por Kiev, según la portavoz Maja Kocijancic.
La organización de una reunión extraordinaria de los ministros comunitarios de Exteriores se topa con problemas de agenda, empezando por Mogherini, que el martes estará en Costa Rica.
La agenda también planea problemas. Edgars Rinkervics y su homólogo lituano Linas Linkevicius reclamaron el sábado la adopción de nuevas sanciones contra Moscú en esa reunión, pero los países miembros sigue divididos al respecto.
"La ofensiva sobre Mariupol ha comenzado hoy", declaró este sábado el dirigente de la república autoproclamada de Donetsk, Alexandre Zajarchenko.
Según el Ayuntamiento de la ciudad anunció un balance provisional de 30 civiles muertos y más de 90 heridos.
La representante de la diplomacia europea, Federica Mogherini, avisó de que esa escalada de violencia iba "a provocar inevitablemente un grave deterioro de las relaciones entre la UE y Rusia", que ya se enfrenta a duras sanciones económicas europeas y norteamericanas, y sigue negando su implicación en el conflicto
"Pido a Rusia que utilice su considerable influencia y cese todo apoyo militar, político y financiero a los dirigentes separatistas con el fin de evitar consecuencias desastrosas para todos", advirtió.
El secretario general de la OTAN, Jens Stoltenberg, exhortó a Moscú a "dejar de desestabilizar Ucrania" y cesar su apoyo militar, político y financiero a los separatistas, que lanzan una ofensiva en el este de Ucrania". "Desde hace unos meses, hemos constatado la presencia de fuerzas rusas en el este de Ucrania y un aumento sustancial de equipos pesados rusos, como blindados, artillería y sistemas sofisticados de defensa aérea", subrayó.
El secretario norteamericano de Estado, John Kerry, apoyó la exigencia. "Si no, se amplificará la presión internacional y la de Estados Unidos a Rusia y sus intermediarios", dijo.
"Las noticias del días muestran que la situación es muy peligrosa", estimó el ministro alemán de Exteriores, Frank-Walter Steinmeier, de visita en Argel.
En la Unión Europea, los países duros han impuesto la línea de gran firmeza en un debate estratégico sobre la relación con Moscú en la última reunión de los ministros de Exteriores, el 19 de enero en Bruselas. Pero no han obtenido el estudio de nuevas sanciones.
Los dirigentes de los 28 deben decidir en su cumbre de marzo si renuevan los primeros paquetes de sanciones decretadas al principio de la crisis ucraniana.
Pero la agravación de la situación en el este ucraniano y las nuevas tensiones con Moscú podrían obligarles a abordar el tema en la cumbre informal del 12 de febrero en Bruselas.