Las autoridades japonesas registraron las oficinas del gigante del comercio en internet Amazon en Japón, sospechoso de presionar a los distribuidores que venden a través de su sitio web, informaron este lunes medios locales.

La autoridad japonesa de la competencia, la Japan Fair Trade Commission, confirmó implícitamente esas informaciones diciendo a AFP que "no eran incorrectas".

La filial japonesa de Amazon es sospechosa de obligar a los distribuidores a comercializar sus productos a precios inferiores a los que utilizan en otras webs comerciales, señaló el diario económico japonés Nikkei.

Amazon Japan, por el momento, no efectuó ningún comentario sobre esas informaciones.

El año pasado, la Comisión Europea había iniciado una investigación contra Amazon por acusaciones similares.