Luego de varios meses de protestas pacíficas, recolección de firmas, y distinta clase de pronunciamientos con el apoyo de ambientalistas y ciudadanía, la constructora del Centro Comercial Gran Bazar llegó a un acuerdo con el grupo defensor del medio ambiente que se negaban a que talaran el árbol de caucho ubicado sobre un predio en la Avenida Santa Rita.

En el acuerdo quedó establecido qué el árbol no será talado y que se trasladará a otro lugar de la capital del Magdalena.

Según Eliana Morón, directora del departamento Administrativo del Medio Ambiente Dadma, la constructora se comprometió a utilizar todas las medidas para que el árbol se salve.

"Ellos han hablado de una inversión entre los 40 y 50 millones de pesos para que se garantice la vida del árbol, la comunidad aceptó y ahora procedemos a realizar unos estudios y a escoger el lugar disponible para que el árbol sea plantado", explicó Morón.

Por otra parte, Jorge Mauricio abogado del grupo de ambientalista 'Salvemos el árbol' manifestó que esta decisión fue tomado luego de que los representantes de dicha construcción dieran los motivos del por qué el árbol debía ser retirado del lugar.

"Nos explicaron que se demoraron en dar la respuesta porque contrataron un arboricultor certificado de la ciudad de Bogotá para que emitiera un concepto encaminado a explicar el por qué la propuesta que se habían presentado no eran viables, como por ejemplo por qué no era viable enmaterar el árbol para dejarlo en el mismo sitio y establecía que finalmente se podría hacer el traslado del árbol sin que el árbol sufriera mayor daño", manifestó.

Los ambientalistas quedaron satisfechos con las explicaciones dadas y lo único que solicitaron fue que él árbol sea trasladado en cualquier sitio del casco urbano para que pueda brindar un servicio a la comunidad.

Propusieron como sitios el Polideportivo, Liceo Celedón e Instituto Magdalena.

Sobre esto el Dadma se comprometió a realizar los respectivos estudios y definir si los sitios antes mencionados están aptos o por el contrario hay que escoger otro lugar de la capital del Magdalena.

En el acuerdo final se estableció como compromiso que la ciudadanía no debía presentar más acciones legales en contra del acto administrativo que autorizó la tala.

Fuente HOY DIARIO MAGDALENA – Por KELYS CASTRO GARAY